Como con cualquier aparato digital, al usar el iPad se deben tener límites. Tanto en la edad de inicio, como y fundamentalmente, en la necesaria y responsable orientación y acompañamiento del adulto y el tiempo de exposición.
Existen aplicaciones que enseñan el alfabeto, palabras en inglés, los números y las formas. Permiten identificar colores, figuras y sonidos, conceptos matemáticos y literarios, reforzando sus procesos mentales.
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